El relato que he hecho inicialmente es este:
- Hola Ricardo. Después de mucho pensar he decidido contarte mi viaje de final de curso de cuarto de la e.s.o.
Fueron varias las clases que estuvimos discutiendo si íbamos o no debido al comportamiento de la clase. Al final, por suerte, fue que sí.
Tardamos alrededor de ocho horas en llegar. El viaje en sí serían unas seis, pero paramos dos horas en Barcelona. Allí nos hicimos fotos, comimos y nos reímos un rato. Estábamos muy nerviosos. Era nuestro viaje de final de curso, además de la última vez que estaríamos todos juntos, y eso nos hacía estar así de contentos y alterados. Después de comer nos subimos al autobús, donde las horas se nos hicieron eternas, y terminamos el recorrido hasta Viella.
Fueron múltiples las paradas que hicimos en aquellos días para ver cosas de la ciudad y de sus alrededores, sin embargo lo que más nos marcó fue la compañía de nuestros amigos.
En el Hotel tuvimos la suerte de ponernos como quisimos. Y como no, yo me puse junto con mis dos grandes amigas, Noemi y María. Fueron cientos los segundos que la risa invadió mi interior a causa de sus tonterías. Hubo abrazos, saltos, expresiones y payasadas. Pero sobre todo, hubo amistad.
Comimos juntas, dormimos juntas… y disfrutamos del viaje.
Es cierto que hubo más de una riña, más de una discusión y no sólo de profesores a alumnos, pero al final todos terminamos unidos.
Al volver tuvimos que sufrir de nuevo el largo viaje, y las muchas horas sentados en el autobús. A la mayoría la vuelta se les hizo más llevadera, más que nada porque se durmieron. Pero los que decidimos estar despiertos y aguantar hasta el final, fuimos los que mejor lo disfrutamos.
De todas formas supongo que al juntar todas las imágenes cambiaré alguna parte.
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